La cadena logística reclama un “estartazo”
La meta a 2022 está trazada: un transporte de carga eficiente, rentable y transparente para lograr una Colombia incluyente y conectada. En esos términos la ministra de Transporte, Ángela María Orozco, esboza el plan que esa cartera pretende ejecutar con la apuesta adicional de consolidar una cadena logística competitiva.
Para la funcionaria, la utilidad y éxito de su despacho se darán en la medida en que lo que pase con infraestructura conecte al país. “El sector transporte mueve todo lo que se produce en el país, por eso queremos fortalecerlo, y para ello hay que promover la legalidad y el emprendimiento”, comenta, a la vez que sugiere que no se siga viendo a la entidad como el ministerio de la infraestructura o el de los contratos.
Las ideas de Orozco pasan por actualizar la legislación del transporte, crear y poner en funcionamiento la Comisión de Regulación de Infraestructura y Transporte (CRIT), fortalecer la Superintendencia de Puertos y Transporte, formalizar a pequeños y medianos transportadores, e incorporar herramientas para la digitalización, estandarización y eliminación de trámites.
Para avanzar en esas tareas, el Ministerio dispondría en 2019 con recursos por 8,76 billones de pesos, cifra superior en un 46,7 % a los 5,97 billones que se le asignaron en el Presupuesto General de la Nación (PGN) de este año.
En la Federación Colombiana de Transportadores de Carga y su Logística (Colfecar) los anuncios oficiales generan expectativa por el dinamismo e impulso que para esta actividad productiva acarrearía el plan ministerial.
Vale la pena anotar que según las cuentas del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane) el año pasado solo el transporte por vía terrestre generó 15,3 billones de pesos. En las estadísticas de Colfecar, en el primer semestre de este año la facturación del sector sumaba 7,18 billones de pesos y la proyección al cierre de 2018 es de 10 billones.
En cuanto a la generación de empleo, los datos del Dane señalan que el total de las tareas asociadas a transporte, almacenamiento y comunicaciones ocupan a 1,74 millones de colombianos.
La visión de la agremiación del transporte
Mientras desde el Ministerio se perfila un plan de trabajo, la presidente de la junta directiva de Colfecar, Nidia Hernández, pide la adopción de medidas que le permitan a los transportadores de carga y su logística enfrentar los retos del comercio y garantizar su subsistencia dentro de un marco legal adecuado para lograr su operabilidad y competitividad.
Según la dirigente gremial las trabas, el exceso de trámites, las sanciones, la informalidad, la competencia desleal y las demoras en los pagos por parte de los generadores de carga, entre otros, tienen al borde del colapso a los transportadores.
Es así como en los últimos tres años, 668 empresas del sector han tenido que iniciar procesos de liquidación, siendo este 2018 el que más casos registra con 270, cifra preocupante si se tiene en cuenta que aún no termina el año.
Hernández denuncia la competencia desleal por parte de empresas ecuatorianas que no pagan un solo galón de combustible en el país, no reportan sus operaciones al Registro Nacional de Despacho de Transporte de Carga por Carretera (RNDC) e incumplen con el Sistema de Información para el Transporte Automotor de Carga (Sicetac).
“Según el Modelo Único de Ingreso Servicio y Control Automatizado (Muisca) de la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), el año pasado los tres primeros lugares en movimiento de toneladas lo ocuparon empresas de transporte ecuatorianas con 160.000 toneladas, mientras que el cuarto lugar lo ocupó una colombiana con 27.000 toneladas. Y hay que tener en cuenta que las empresas de transporte colombianas no pueden ingresar al territorio ecuatoriano”, precisa.
Un comercio internacional que pide pista
Javier Díaz Molina, presidente de la Asociación Nacional de Comercio Exterior (Analdex), insiste en que cuando se mira la estructura de costos logísticos en Colombia, estos representan en promedio el 15 % del valor de los productos finales y, ¿dónde está el mayor peso en esa estructura de costos?
El dirigente responde que son justamente transporte y almacenamiento los de mayor representatividad. “Lo que hay que mirar es como reducir esa estructura de costos y hay un elemento clave que es la intermodalidad, aspecto que involucra al ferrocarril y la navegación, en particular, por el río Magdalena. Igualmente será clave eliminar los cuellos de botella en el transporte terrestre, como los tiempos muertos y las inspecciones”.
Para alcanzar esos propósitos Diaz recuerda que desde hace dos años viene trabajando la Misión de Logística y Comercio Exterior para Colombia que apunta a armonizar la demanda de servicios logísticos locales en función de potencialidades regionales.
También resalta como en la clasificación del Índice de Desempeño Logístico del Banco Mundial, que sale cada dos años, el país pasó del puesto 94, en 2016, a la casilla 58 en los resultados dados a conocer en julio pasado.
La apuesta por un sector muy responsable
La Asociación de Fomento y Seguridad en Distribución Física de Carga (Defencarga), aboga por la implementación de mecanismos que permitan controlar el efecto que genera las emisiones de gases efecto invernadero.
“Un parque automotor antiguo genera efectos adversos sobre el medio ambiente y además incrementa los costos de transporte y reduce la calidad del servicio prestado”, señala Clarita María García Rúa.
El poco avance en la modernización del parque automotor se corrobora con la existencia de un parque antiguo, en el que el 61 % de los vehículos supera los diez años, porcentaje que en países de similar desarrollo como Chile no alcanza el 30 %, advierte el Departamento Nacional de Planeación.
En ese contexto, es necesaria la definición de parámetros de permanencia en el mercado (para los equipos de transporte), según el criterio de uso eficiente de vehículos, acelerar los procesos de chatarrización y orientación de la política pública hacia la modernización del parque.
Fuente: http://www.elcolombiano.com